de Carmen Fabre


Bochorno


       Hace calor, un calor insoportable.
       Alejandro da vueltas en la cama incapaz de conciliar el sueño mientras piensa en Patricia que vive dos pisos más abajo.
       Patricia sueña excitada con Eusebio, que ve la televisión en el apartamento de al lado.
       Eusebio apaga el televisor y recuerda el suéter ajustado de Teresa, la maestra del 4º D.
       Teresa se levanta a por un vaso de agua para aliviar el bochorno y repasa la estrategia para que Alejandro, su vecino, se percate de su existencia… Y así transcurre una noche sofocante de Agosto en el bloque “A” de la calle Armenteros.
       Y por la mañana, a las 8.30, se saludarán en el portal como todos los días, como si nada.








La isla de las palabras perdidas



       Al norte, en el “Mar de la Nostalgia”, lindando al este con el continente “Olvido” y al oeste con el archipiélago “Indiferencia”, se halla la “Isla de las Palabras Perdidas”.
       Allí llegan cada día las que naufragan, las que no se dicen, las que se atenazan en la garganta.
       Muchas se quedan para siempre. Prefieren que sus propietarios no las encuentren jamás.
       Otras, sin embargo, se lanzan una y otra vez al océano con la esperanza de que sus dueños las encuentren y… las digan.








Traición compartida



       — Te amo - le dijo.
       Me ntía.
       —No concibo la vida sin ti, amor - respondió ella.
       Lo engañaba sin pudor alguno. Con alevosía. Igual que él a ella.
       Ambos lo sabían.
       Y se besaban en la boca fingiendo pasión. Él, pensando en otra. Mientras, ella le correspondía recordando besos de otros labios.
       La escena se repetía periódicamente y resultaba impecable.
       Llevaban años hablando de futilidades, representando sentimientos inexistentes e interpretando una historia de amor tan falsa como duradera e indestructible.
       Los demás al verlos les consideran “la pareja perfecta”.
       Ellos, en cuanto percibían su admiración, se miraban con auténtico arrobo y sonreían plenamente satisfechos de la perfección de su engaño, de la traición compartida.





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2 comentarios:

  1. La suma total de los títulos de tus tres breves textos sería:
    Bochorno en la isla de las palabras perdidas para una traición compartida.
    Y es que los tres textos comparten apartamento temático. En el primero se fragua el silencio de esas palabras no dichas que llegan luego a esa isla pedida. En el segundo están las palabras que no se dicen en el tercero, que es todo mentira auténtica.
    Lo particular, cada micro, tiene su razón de ser, en sí mismo... y el total es un barrio de palabras y deseos y de gente que son vecinos de la soledad sin darse cuenta.
    Besoabrazote...

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